La vida es difícil, y a veces nos pega tan duramente en nuestras ilusiones, que creemos que no podremos volver a levantarnos nunca más.
En esos momentos, nuestra cabeza se llena sólo de malos pensamientos, y lo único que queremos es rendirnos, tirar la toalla, dejando todo atrás y lamentarnos de nuestro sufrimiento.
Pero yo sé que vosotros no sois como los demás, sois diferentes y especiales.